La meditación, mindfulness y el yoga son tres conceptos que tienen mucho que ver entre sí. La meditación es un ‘entrenamiento’ para la mente y el cuerpo que lleva a una mayor libertad emocional y mental. Aunque en su concepción se asocia a la espiritualidad de ciertas tradiciones, actualmente ya se considera adaptada a los contextos más seculares y también como una pequeña parte/arista de la sanidad.
¿Qué relación guarda la meditación con el mindfulness? Mientras que la meditación engloba técnicas muy variadas en las que la visualización, la mente analítica, procesos de pensamiento positivo o trabajos de indagación sobre procesos de conciencia son algunas de ellas, el mindfulness es un tipo de meditación. El mindfulness como tal es una de las primeras técnicas de meditación que se aprende. Se ha extraído el contexto espiritual y presentado con un lenguaje más psicológico a la sociedad.
El mindfulness es un tipo de meditación que se centra en el aquí y el ahora, tomando conciencia del momento presente y aislando las variables del estrés, los problemas futuros y los agobios innecesarios. Es una atención plena al presente. Ayuda a través de la meditación a mejorar el bienestar, la capacidad de concentración y atención a lo que sucede a nuestro alrededor.
Con respecto al yoga, podríamos decir que utiliza la filosofía del mindfulness para reforzar el equilibrio entre la mente y el cuerpo. Se centra en trabajar la flexibilidad y resistencia muscular, por lo que no es una actividad únicamente meditacional sino que sirve tanto para la mente como para el cuerpo.
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